La oficina / Consejos e información para el consumidor / Viviendas / Impermeabilización del sótano
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Un sótano con goteras es uno de los problemas más frustrantes que puede enfrentar un propietario. Los problemas de agua suelen ser difíciles y su solución puede resultar costosa. No obstante, pagar por una costosa impermeabilización no es siempre la mejor solución.
Los servicios que han sido ofrecidos a algunos consumidores han resultado ser ineficaces o inadecuados para corregir los problemas de agua en los sótanos. Adicionalmente, las garantías que han sido ofrecidas por algunos contratistas son imprecisas y confusas.
La ley protege a los consumidores
Los vendedores de servicios de impermeabilización de sótanos deben seguir las siguientes pautas, acorde a lo estipulado por los estatutos Wis. Admin. Code ch. ATCP 110.09:
Proporcionarle un “análisis del vendedor” al cliente que describa el problema del agua y los métodos y materiales específicos que se utilizarán para corregirlo antes de finalizar cualquier contrato.
Proporcionar todas las garantías por escrito. Lea atentamente estas garantías porque muchas excluyen condiciones comunes, como la humedad en las paredes del sótano.
Antes de anunciar el uso de métodos eficaces, el vendedor debe tener experiencia en el uso de dicho método y el método debe ser reconocido por la industria como un método estándar de uso.
Los servicios de impermeabilización de sótanos solo podrán vender el método de bombeo a presión si han establecido la necesidad o eficacia del procedimiento, el mismo ha sido verificado por un ingeniero y se le ha proporcionado la información al comprador antes de la venta.
Si decide utilizar un servicio de impermeabilización de sótanos, asegúrese de que el vendedor cumpla con todos los requisitos anteriores.
Si cree que un vendedor ha violado alguna de estas regulaciones, usted puede acceder a los recursos a su disposición. Puede presentar una queja ante la Oficina de Protección al Consumidor o puede acudir a los tribunales. En el tribunal, puede solicitar recuperar el doble de la cantidad de dinero perdido, más los costos judiciales y los honorarios del abogado. Comuníquese con un abogado para analizar un recurso judicial en su situación.